En Colombia se toma más café importado que nacional
Colombia huele a café. Tal vez no es tan literal tras bajarse del avión o de las diferentes modalidades de transporte terrestre del país, pero es una imagen que ha caracterizado al país desde hace décadas.
Hoy, el café colombiano sigue siendo una idea-fuerza que identifica a nuestro país. Y es que cuando se habla de café surgen imágenes de las fincas cafeteras en departamentos como Quindío, Caldas, Risaralda, Santander y Huila. Allí, los visitantes pueden disfrutar paisajes de colinas y auténticas montañas en las que se siembran y cosechan miles de bultos de café.
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Este grano se dirige al consumo interno, sí, pero sobre todo a los mercados internacionales. En efecto, el café suave colombiano es muy apetecido en los mercados internacionales y, por su calidad, tiene una prima que ha llegado a superar los 50 centavos de dólar en la Bolsa de Nueva York. Según el estudio realizado en 2021 por la firma Reinova para la Federación Nacional de Cafeteros, nuestro país exporta el 96% de su producción.
La plataforma del Mapa Regional de Oportunidades (MARO), de Colombia Productiva, indica que, en 2021, las ventas externas de café colombiano (incluyendo “Descafeinado, tostión y molienda de café” y “Trilla de café”) fueron por USD $3.187 millones. Entre enero y agosto de 2022, estas llegaron a USD $2.806 millones, una muestra de que vienen superando a las del mismo periodo del año anterior, cuando fueron por USD $1.904 millones.
En contraste con la situación exportadora, Colombia viene aumentando sus compras internacionales de café. De acuerdo con MARO, en 2019 las importaciones de la subpartida arancelaria “Los demás cafés sin tostar, sin descafeinar” vienen creciendo: en 2019, el país importó 43.805 toneladas, en 2020 fueron 63.192 y en 2021 101.459 toneladas. Además, en los primeros siete meses de 2022 se importaron 64.097 toneladas, es decir, 9.764 más que en el mismo periodo de 2021, cuando se registraron 54.333 toneladas.
Los colombianos están tomando más café
Entre los resultados del estudio realizado por la firma Reinova que reveló la Federación Nacional de Cafeteros, se destaca el aumento del consumo interno de café en los últimos años.
“Estas positivas cifras son fruto de los esfuerzos en los últimos años para elevar el consumo interno de café, así como de un creciente conocimiento sobre los muchos beneficios de la bebida para la salud”, señaló la entidad.
Para finales de 2021, el estudio calculó que “el consumo interno de café en Colombia habría aumentado a 2,8 kg per cápita”.
El café colombiano se vende al mejor postor: el mercado extranjero
Más allá del aumento en el consumo, ¿qué café toman los colombianos? Al respecto, la FNC indicó que el principal mercado para el grano que se produce en el país es el internacional, pues tiene estándares que superan la capacidad de pago y los gustos de la mayoría de colombianos:
“Ni toda la industria nacional, ni la gran mayoría de los consumidores colombianos están dispuestos a pagar lo que cuesta el café colombiano de alta calidad”. El gremio agrega que “se trata de un fenómeno de mercado, no de desabastecimiento, de mayor disposición a pagar por parte de los mercados internacionales por el café colombiano”.
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En Colombia, entonces, se consume mayoritariamente café nacional que no alcanza los estándares del de exportación y, cada vez más, café importado de baja calidad.
Los colombianos tomamos cada vez más café importado
Según el portal Bloomberg Línea, en 2020, de cada 10 tazas de café que se consumieron en el país, 5,5 fueron preparadas con café importado. Esto significa que los colombianos están tomando más café de extranjero que nacional.
Al revisar los datos de MARO, se puede ver que, entre enero y julio de 2022, el país que más le vendió café a Colombia fue Brasil, con USD $133 millones en la subpartida “Los demás cafés sin tostar, sin descafeinar” y una variación positiva del 93% en relación con las ventas reportadas en el mismo periodo de 2021, cuando llegaron a USD $68 millones. Se trata de un crecimiento vertiginoso desde el año 2016, cuando se importaron apenas 1,3 millones de dólares de esta subpartida.
Para la misma subpartida, el segundo proveedor de Colombia fue Perú, con la venta de USD $49 millones en los primeros siete meses de 2022 y de USD $16 millones en el mismo periodo de 2021. Honduras, Ecuador y Vietnam también le venden café a Colombia.
Desde 2015, las importaciones de café a Colombia (en la subpartida “Los demás cafés sin tostar, sin descafeinar”) han venido aumentando de manera considerable, con dos picos. El primero de ellos fue en 2018, cuando ascendieron a USD $93 millones, mientras que el segundo pico se registró en 2021, año en el que alcanzó el nivel más alto del periodo, al llegar a los USD $196 millones.
Pues bien, este 2022 se superará el récord de 2021, ya que en los primeros siete meses las importaciones de la subpartida “Los demás cafés sin tostar, sin descafeinar” ascendieron a USD $210 millones, más que duplicando los valores del mismo periodo del año anterior, cuando las compras externas fueron por un valor de USD $89 millones, e incluso superando las de todo el 2021.
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