Exportador de la semana: Con la obra de Frida Kahlo y autores colombianos, Cangrejo Editores está conquistando el mundo
La empresa colombiana, Cangrejo Editores, está dejando en alto al país en América Latina, España, Estados Unidos y el Caribe. Representa obras tan destacadas como las de la familia Kahlo en México y autores colombianos como Jorge Eliécer Pardo y Carlos Jacanamijoy. Entrevista exclusiva con su fundador.
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La industria editorial en Colombia fue una de las más afectadas por la pandemia de Covid-19, debido al confinamiento y a la virtualidad de la educación básica y superior. Como resultado de esto, en los años 2020 y 2021 las ventas estuvieron por debajo de los niveles registrados en 2019.
Por fortuna, en 2022 la situación cambió. Ese año, de acuerdo con la Cámara Colombiana del Libro, los indicadores de ventas no solo alcanzaron los niveles previos a la pandemia, sino que incluso fueron superados en algunos de los subsectores que componen la oferta de la industria editorial colombiana.
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Según el gremio editorial, las ventas netas del sector ascendieron a $900.239 millones de pesos en 2022, con un crecimiento de 32,9% frente a 2021. Se trata de un aumento real, pues es superior a la tasa de inflación del año anterior.
Estas cifras revelan que la industria editorial ha ido consolidando su presencia en Colombia y el mundo. A esto ha contribuido una compañía colombiana nacida hace casi tres décadas, cuyos dueños tienen más de 35 años de experiencia en la industria editorial.
Se trata de Cangrejo Editores, una empresa exportadora de cultura literaria, con presencia en América Latina, España y el Caribe, que promociona autores colombianos y latinoamericanos de gran relevancia en la actualidad.

En esta entrevista con el fundador de Cangrejo Editores, Víctor Hugo Cangrejo, destacamos la labor que ha adelantado al lado de su hermana, Leyla Viviana Cangrejo, y que los convierte en líderes y autoridad para posicionar las exportaciones de la industria editorial en Colombia.
A continuación, puede leer la entrevista, que también podrá ver completa en el video ubicado en la parte superior de la página.
¿Cómo nace Cangrejo Editores y de dónde viene este nombre?
Cangrejo Editores viene del apellido de sus fundadores, los hermanos Leyla Viviana Cangrejo y Víctor Hugo Cangrejo.
Con 35 años en el medio editorial, inicialmente como distribuidores, decidimos darle un nombre que tuviera recordación.
Ese nombre no podía ser otro que Cangrejo Editores, que es nuestro apellido, pues por experiencias anteriores sabíamos que tenía una amplia recordación en todas las ferias a las que asistíamos.
¿Cómo empiezan ustedes la compañía?
La compañía se inició en el año 1993, inicialmente como una empresa comercializadora.
A raíz de ese ejercicio, accedimos a varias oportunidades comerciales, como ferias internacionales de la industria editorial y a mercados importantes del mundo como el mexicano, el argentino, el español y otros emergentes en Latinoamérica. Así fue como nos vimos inclinados por ese “diablillo” que significa empezar a editar.
Con la experiencia que traíamos, en el año 2000 editamos nuestros primeros dos títulos. Ese mismo año arrancamos en forma y se consolidó la empresa familiar.
Actualmente, tenemos en catálogo alrededor de 500 títulos activos bajo el sello Cangrejo Editores, y representamos a otras editoriales del mundo para América Latina.
¿Qué tipos de libros conforman este catálogo y cuáles son los autores más destacados?
Al fundar nuestra editorial, una de las premisas que nos fijamos con Leyla fue la promoción de los autores latinoamericanos.
Especialmente de aquellos que, siendo muy buenos escritores, no tenían oportunidad de acceder a las grandes cadenas multinacionales de editoriales porque no llegaban, por desconocimiento o por lo que fuera, incluyendo por supuesto a los autores colombianos.
Así, nos hemos dedicado a ser unos promotores de la muy buena literatura de todos los países de Latinoamérica.
Por ejemplo, hemos establecido unos puentes interesantes con varios autores mexicanos, entre ellos la familia de Frida Kahlo, que nos confió a nosotros toda la obra y el archivo personal de la familia.
Tenemos, además, al profesor Luis Martín Lozano y a Rosa Casanova, directora de la Hemeroteca Nacional de México.
También tenemos países como República Dominicana, en donde hemos publicado antologías de autores dominicanos, y por ello hemos tenido reconocimientos de la Embajada Dominicana en Colombia.
A su vez, publicamos autores argentinos, ecuatorianos y venezolanos, entre otros. Como pueden ver, la gama de autores es muy grande y de distintos nichos, como infantil, juvenil, interés general, novela, poesía, cuento, ensayo y obras periodísticas.
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¿Cómo logra Cangrejo Editores llegar a esos mercados internacionales y en qué países tiene presencia?
Otra de las premisas de Cangrejo Editores fue la de producir libros con un gran contenido editorial y una alta exigencia.
Desde el punto de vista editorial, Leyla Cangrejo hace un trabajo impecable como editora. Además, contamos con una de las industrias gráficas más importantes de Latinoamérica. Esto nos llevó a posicionar nuestro sello por su calidad editorial. Y, detrás de esto, llegan los autores.
En Sudamérica estamos en todo el subcontinente. En Centroamérica también, salvo en Honduras por cuestiones de logística. Además, llegamos al Caribe, con Puerto Rico y República Dominicana, y a España. Y no puede faltar el mercado en español de los Estados Unidos, a través de un distribuidor en la Florida.
Los mercados más importantes de este momento son México, Argentina —que es el país más lector de Sudamérica— y un nuevo mercado que estamos explorando y que no ha sido fácil es Brasil, en donde ya tenemos varias de nuestras ediciones en portugués.
¿Cómo llegan?
En las distintas ferias del libro, en los encuentros que hacemos a través de nuestros distribuidores y libreros en cada país.
Ha sido un proceso de encontrar durante estos 30 años quiénes son los grandes distribuidores y los grandes protagonistas de la cadena del libro en cada uno de los países de América Latina en donde estamos presentes.
¿Qué desafíos han enfrentado ustedes con Cangrejo Editores en el proceso de la exportación de libros y cómo fueron superados?
Lamentablemente, no hay apoyo institucional. Hoy por hoy, tenemos una entidad como ProColombia que ha estado respaldando a los exportadores, pero tiene sus limitaciones porque no puede llegar a intervenir directamente en controversias particulares. Esos son los desafíos básicos.
Los otros desafíos son, por ejemplo, de tipo idiomático. Otro desafío ha sido el de la impresión; en Colombia nos gusta mucho imprimir en papel de color beige o crema, pero en México no les gusta ese color porque los libreros suponen que es un papel al que le ha dado el sol y prefieren el color blanco.
Son ese tipo de particularidades, que hemos tenido que ir ajustando a lo largo del camino.
¿Qué reproches tienen de la industria editorial colombiana?
Aun cuando luchamos, los editores colombianos estamos bastante desamparados desde los puntos de vista institucional, reglamentario y político. No hay una protección para la industria editorial colombiana, como sí la hay en otros países.
En México las compras estatales obligan a que un gran porcentaje de los recursos se destinen a editoriales mexicanas. En Colombia no porque hay muchos actores de multinacionales, aunque gracias a ellas hemos aprendido muchas cosas.
No podemos censurar la competencia o la presencia de estas empresas extranjeras en el mercado, pero sí falta estímulo a la industria nacional, falta apoyo institucional.

¿Cuáles son esos desafíos que enfrenta hoy la industria editorial en tiempos de inteligencia artificial y de formatos digitales?
La respuesta es: “no van a desaparecer los libros impresos”. Y te voy a poner en contexto. Hace unos 8 o 10 años, en un simposio que hubo en la Feria del Libro de Guadalajara, se lanzaron con muchos bombos el libro electrónico y el e-book, y se anunció que se iniciaba el fin del libro impreso.
Los editores amantes de los libros en papel, del olor a tinta, de nuestro libro subrayado con muchas notas al pie de página y demás, nos cogimos la cabeza y dijimos “Dios mío, se acabó esto”.
Pero pasados 10 años nos hemos dado cuenta de que no fue así. El libro electrónico ha venido a ocupar un espacio importante y a ser una oportunidad para cierto tipo de público amante de la lectura en la tablet o en un computador, pero no para todos los lectores.
Hay lectores que seguimos seducidos por la idea del libro impreso en papel. Por eso digo que la industria editorial lo que hizo fue acomodarse y ajustarse.
El libro electrónico significó un avance importante para la lectura de libros de referencia, artículos específicos y libros universitarios, en donde anteriormente tocaba comprar todo el libro para leerse medio capítulo. Hoy en día, se encuentra fácilmente en un libro electrónico.
¿Qué ha pasado con la Inteligencia Artificial?
Cangrejo Editores ha venido ajustando sus producciones y proyectos. Hoy, ya contamos con varios libros producidos en formatos como el e-book y el e-pub.
Estos formatos están disponibles en nuestra página y en plataformas a las que hemos tenido que llegar con ellos. Por ejemplo, con Bookwire en Alemania, que es un gran suplidor de contenidos electrónicos en el mundo.
Esto también nos ha llevado a que pensemos cómo tenemos que complementar nuestra producción, y hemos empezado el desarrollo de los audiolibros para Cangrejo Editores.
Hay editoriales que lo venían haciendo de tiempo atrás, pero entendimos que el audiolibro es una necesidad. Ya lo estamos haciendo y próximamente vamos a tener disponibles varios de nuestros títulos en audiolibro.
Y en la parte de Inteligencia Artificial, vamos a tener una gran novedad en la feria del libro, gracias a una alianza estratégica que hicimos con una empresa muy importante en los Estados Unidos.
Vamos a incorporar el concepto de Inteligencia Artificial a nuestros libros infantiles. Incluso, los niños van a poder interactuar, se van a poder meter dentro de la pantalla del proyecto del libro que les vamos a presentar y van a practicar sus idiomas. Van a poder hablar el idioma que quieran, practicarlo, escucharlo, leerlo, pronunciarlo.
Digamos que eso es lo que tenemos, ajustados a esa nueva realidad de la tecnología.
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¿Cuál es el país que más lee libros en el mundo y en qué posición está Colombia?
Hasta hace algunos años, Japón ocupaba un lugar muy importante. Un japonés lee 24 o 25 libros al año. Hoy, el país más lector y que más horas emplea en lectura es la India, seguido por Tailandia.
Si vemos el ranking de los 20 países más lectores en el mundo, solamente hay uno de Latinoamérica: Argentina, en el puesto 19. En Colombia el promedio de lectura está en 2,4 libros al año.
¿Qué hace Cangrejo para cautivar lectores?
Cangrejo Editores ha emprendido una cruzada muy interesante de responsabilidad social junto a una entidad que se llama Global Humanitaria, que está propendiendo por abrir, propagar, difundir y cautivar lectores en toda el área del Pacífico, específicamente en Tumaco.
El objetivo es recuperar a estas comunidades que no tienen otro aliciente en la vida que ser capturadas por grupos irregulares de la tendencia que sea, y ni siquiera tienen televisión.
Estamos llevando bibliotecas y generando promotores de lectura, talleres de lectura, incentivos para que cada vez vengan más niños a leer, a escribir y a contarnos sus historias.
¿Qué les falta a los autores para ser conocidos?
A los escritores les falta que los promocionen, porque lamentablemente ocurre un fenómeno, y es que las grandes editoriales multinacionales publican autores muy buenos, pero solo para el país de origen y los dejan allí, encasillados.
Entonces, si es ecuatoriano, publican los libros para el Ecuador y hacen unas pequeñas ediciones para países colindantes, pero en el resto del mundo no los conocen. Hacen parte del catálogo, pero no se difunden.
¿Cómo promueven ustedes a los autores que representan y cuáles son?
En el caso nuestro, nosotros difundimos a nuestros autores. Hace dos semanas llegamos de Frankfurt, y una de las grandes sensaciones fue la obra de Jorge Eliécer Pardo.
Otro de los grandes libros que llamó la atención fue Los Sabores de mi México, que es la obra culinaria y artística de Frida Kahlo, y con eso visualizamos autores en el exterior, en Europa, y hacemos que los vean.

Llevamos el libro de Carlos Jacanamijoy, uno de nuestros grandes artistas plásticos colombianos. Publicamos su obra, su retrospectiva, del 2000 al 2015, y lo llevamos este año a la Feria de Frankfurt, y fue toda una sensación porque en Europa saben quién es Carlos Jacanamijoy, pero no sabían que era colombiano.
Ahora ya saben que es colombiano. Y te reitero. Debemos visibilizar más a nuestros autores colombianos. Gracias al Nobel ganado por Gabriel García Márquez, los ojos del mundo se volcaron hacia Colombia en materia de literatura.
Por eso pueden buscar oportunidades y tienen casas editoriales a su servicio. Además, hay promotores de lectura y encargados de visibilizar la obra y la cultura de Colombia para hacerlas más visibles en el mundo.

Otras cifras de la industria editorial
De acuerdo con las cifras de la Cámara Colombiana del Libro por subsectores, las publicaciones de interés general lideraron las ventas en 2022, con una participación de 41% en el monto total y seguidas por las de educación, con 29% del total. Entre ambas líneas editoriales, alcanzaron el 70% de las ventas totales.
En este mismo año se vendieron un total de 46,7 millones de ejemplares, lo que representa un incremento de 51,7% frente al año anterior. Esta tasa de crecimiento es muy significativa y muestra la recuperación del sector editorial después de los difíciles años de pandemia, cuando la demanda de publicaciones se vio muy afectada.
Según la Cámara del Libro, la industria editorial empleó a 5.370 personas en 2022, un aumento del 23,9% con respecto al año 2021. El 89,6% del personal empleado es permanente, mientras que el restante 10,4% es personal temporal. La mayor contribución al crecimiento del empleo se encuentra en el personal permanente, con 16,8 puntos porcentuales a la variación total.