Inicio  »  Columnistas  »  ¿Vivir o miedo?

¿Vivir o miedo?

Marta Isabel González, Columnista, Más Colombia, Vivir o miedo

Marta Isabel González

Ingeniera de Diseño de Producto, Magíster en Mercadeo, creadora de La Vendedora de Crêpes.

Soy una gallina, a mis tiernos 36 años me da miedo hasta pasar una calle porque siento que en cualquier momento va a aparecer de la nada un carro fantasma que me va a mandar volando al otro mundo; me da miedo manejar sola en la noche; me da miedo hacer viajes largos en avión porque tengo una neurona que se encarga exclusivamente de decirme que el avión se va a caer, y así como esos tengo montones de miedos que muchas veces no tienen sentido, pero que ahí están aunque la estadística juegue en su contra.

La estadística no es amiga del miedo porque si es favorable no lo disminuye y si no es favorable lo potencia. Sin embargo, pasa algo mágico en la vida y es que en algún momento se le pierde el miedo al miedo y creo que es una de las grandes y pocas ventajas que tiene ser adulto.

No sé si a todos nos pasa al mismo tiempo, o si estoy asumiendo erróneamente que a todos nos pasa, pero si no te ha pasado creo que es hora de hacer todo lo posible para que pase. ¿La fórmula para hacerlo? Hacer tantas cosas con miedo como sea posible.

Le puede interesar: ChatGPT y la inteligencia artificial: así puede ayudar a las empresas

Emprender me dio mucho miedo, terror más bien, pero lo hice; manejar desde Bogotá hasta Medellín me daba miedo, pero lo hice; cambiar el modelo del negocio que llevo seis años ejecutando me da miedo y un frío en el estómago, pero lo estoy haciendo.

Y nos pasan tantas cosas y nos vemos obligados a hacer tantas cosas con miedo, que se nos vuelve rutina y le perdemos el miedo al miedo, y ahí le empezamos a ganar a la vida. Ya no pensamos en todo lo malo que podría pasar si lo hacemos, sino en todo lo bueno que puede surgir de tomar la decisión de hacerlo. Y, como el fracaso es una materia que a todos nos toca ver en la vida, también le perdemos el miedo y entendemos que fracasar no solo no es tan grave como pensamos, sino que es un aprendizaje para futuros éxitos.

No creo que sea posible vivir sin miedo, pero tengo la certeza de que es posible vivir sin miedo al miedo y se los recomiendo.

También de esta columnista: El círculo dorado

Salir de la versión móvil