Inicio  »  Finanzas personales  »  Cómo elegir el tipo de préstamo adecuado según tus necesidades financieras

Cómo elegir el tipo de préstamo adecuado según tus necesidades financieras

Para saber cuál es el préstamo adecuado se deben conocer los tipos de créditos disponibles y evaluar factores como los montos ofrecidos, las tasas de interés, los plazos de pago y el tipo de cuota. Preguntar y comparar opciones es clave para tomar la mejor decisión financiera.
Cómo elegir el tipo de préstamo adecuado

Saber cuál es el préstamo adecuado, según las necesidades y capacidades de pago, es clave para evitar problemas financieros innecesarios. No todos los préstamos funcionan igual: los requisitos, los montos que se pueden solicitar, las tasas de interés que se deben pagar y los tiempos de desembolso y de pago son algunos de los aspectos que varían dependiendo del tipo de crédito que se adquiera.

Según la Superintendencia Financiera de Colombia, el 78% de los adultos del país tiene algún producto de crédito formal, lo que demuestra la importancia del crédito para los hogares. Las diversas opciones, como los préstamos personales, los créditos hipotecarios y los préstamos de libre inversión, se pueden adquirir en bancos tradicionales o mediante créditos online, que suelen ser alternativas más rápidas y con menos requisitos.

A continuación, le damos algunas pautas claves para elegir el crédito más indicado.

.

El primer paso es elegir el tipo de préstamo

Las entidades financieras ofrecen tres categorías principales de créditos: personales, hipotecarios y de libre inversión. Cada una responde a necesidades distintas y requiere un análisis previo de las condiciones bajo las cuales le prestarán el dinero.

1. Préstamo personal

Es una de las opciones más comunes. Se otorga con una destinación específica y suele pagarse en cuotas fijas durante un período determinado. Este tipo de préstamo se utiliza con frecuencia para cubrir gastos imprevistos de salud, pagar costos asociados a la educación o consolidar deudas.

Los montos, así como las tasas de interés y los plazos de pago, dependen del perfil crediticio, los ingresos, la capacidad de pago del solicitante y el nivel de riesgo para el prestamista.

2. Crédito hipotecario

Según la Ley 546 de 1999 y la Circular Externa 100 de 1995 de la Superintendencia Financiera, se consideran créditos de vivienda los destinados a la compra, construcción o remodelación de inmuebles, con plazos iguales o superiores a cinco años y garantía hipotecaria.

Este tipo de créditos tienen como garantía el mismo inmueble u otra finca raíz. Con tasas más bajas que otras modalidades de empréstito, pero con compromisos de largo plazo, codeudores y seguros obligatorios asociados, los créditos hipotecarios son ideales para adquirir vivienda o invertir en finca raíz cuando se cuenta con la cuota inicial y un trabajo estable con cierta antigüedad.

Al momento de adquirir un préstamo hipotecario es importante definir si se prefiere una cuota fija en pesos o una cuota variable en UVR. Asimismo, es importante corroborar que se podrán hacer abonos a capital sin ningún tipo de penalidad.

.

3. Crédito de libre inversión

Este tipo de préstamo permite usar el dinero en lo que el usuario quiera, sin tener que justificar el destino de los recursos. Puede utilizarse, por ejemplo, para viajar, estudiar, comprar dispositivos de tecnología o unificar deudas.

Las características principales de este crédito son:

  • No requiere codeudor.
  • Ofrece tasa y cuota fija durante el crédito.
  • Permite abonos extraordinarios sin penalidades.
  • Suele ser más costoso.

Aunque es flexible, el préstamo adecuado en esta categoría debe evaluarse con cautela, ya que las tasas pueden ser más altas que las de otros créditos —suelen ser cercanas o iguales a la tasa de usura—, debido al mayor riesgo que asumen las entidades.

Las tasas de interés son claves para elegir el préstamo adecuado

El costo del dinero depende de la tasa de interés aplicada y esta a su vez suele depender de factores como el tipo de crédito, el nivel de riesgo que asume el prestamista, el monto solicitado, el plazo de pago y los requisitos exigidos. A mayor tasa de interés, más costoso será el crédito, por lo que es conveniente tener en cuenta esta variable al momento de elegir la opción más adecuada.

En Colombia, la Superintendencia Financiera fija mensualmente la tasa de usura, que es el límite máximo legal que los bancos pueden cobrar de intereses por un crédito. Si una entidad cobra una tasa superior a la de usura, el contrato es ilegal.

En octubre de 2025, esta tasa fue del 24,36% efectivo anual (e.a.) para créditos de consumo y ordinarios. Conocer este dato permite comparar ofertas y evitar sobrecostos.

También es importante revisar antes de firmar si el tipo de interés será fijo o variable. En el segundo caso, conviene evaluar con qué periodicidad y con qué condiciones se ajustará.

.

Plazos: la clave del equilibrio financiero

El plazo determina el tiempo durante el cual se pagará el préstamo. Los plazos más largos reducen el valor de la cuota, pero aumentan el costo total de los intereses. En cambio, los plazos cortos exigen pagos mensuales más altos, pero reducen el monto total que se pagará por concepto de intereses.

Elegir el préstamo adecuado implica encontrar un punto medio en el que las cuotas se puedan pagar con comodidad, pero no resulten tan bajas que impliquen el pago excesivo e innecesario de intereses.

Tenga en cuenta que, mientras en créditos hipotecarios los plazos pueden ir de 5 a 30 años, en los préstamos personales o de libre inversión suelen estar entre los 12 y los 60 meses.

Una práctica útil es calcular la proporción de ingresos que se destinará a la cuota mensual; las entidades recomiendan que no supere el 30% del ingreso neto.

Costos ocultos: un tema que se debe revisar

Al elegir el crédito adecuado se debe averiguar con detalle si además de las cuotas mensuales el usuario deberá incurrir en otro tipo de gastos. Al momento de solicitar un crédito, vale la pena preguntar por costos como los siguientes:

  • Cobros adicionales por estudio de crédito o desembolso.
  • Penalidades por pago anticipado.
  • Seguros asociados al préstamo.
  • Cláusulas sobre mora o reestructuración de la deuda.

Antes de adquirir un crédito se deben revisar las distintas opciones que hay disponibles en el mercado y hacer preguntas de detalle sobre las condiciones, entre las que se destacan las siguientes:

  • Requisitos para acceder al préstamo.
  • Montos que le ofrecen.
  • Plazo de desembolso.
  • Tasa de interés que tendrá que pagar.
  • Valor del seguro y si es obligatorio.
  • Si las cuotas y las tasas serán fijas o variables.
  • El tiempo que le tomará pagar la totalidad del préstamo.
  • Los intereses de mora si se “cuelga” con una o varias cuotas.
  • Si hay alguna penalidad por hacer abonos a capital para reducir el monto total de los intereses que se pagarán.
  • Costos ocultos.

De ser necesario, vale la pena consultar con un profesional, pues elegir el préstamo adecuado puede ahorrarle una buena suma de dinero.

Siga leyendo: Aumento salario mínimo 2026: ¿alcanzará para vivir? Corrientazos, pasajes y canasta básica con el nuevo salario

Salir de la versión móvil