Venta de acciones de Ecopetrol Permian: la empresa desmiente plan de desinversión y la Contraloría mantiene auditoría
La empresa negó que existan discusiones o estudios para vender las acciones de Ecopetrol en el Permian Basin, mientras el presidente Petro y la Junta Directiva evalúan el tema en medio de tensiones políticas, sindicales y fiscales.
La petrolera negó oficialmente que esté considerando la venta de las acciones de Ecopetrol en el Permian, el activo que más rentabilidad le genera fuera del país. La declaración se conoció el 7 de noviembre, cuando la estatal respondió a un requerimiento de la Contraloría General de la República, que solicitó información técnica, financiera y jurídica sobre una posible desinversión en Estados Unidos.
“Hasta la fecha, Ecopetrol no ha realizado ningún análisis ni evaluación para la venta del activo”, indicó la compañía en una carta enviada al ente de control. El pronunciamiento se da luego de semanas de especulación sobre la posible orden presidencial de vender el 49% de participación en la cuenca del Permian Basin, ubicada en Texas, Estados Unidos.
Según la empresa, no contempla terminar la operación, que representa el 15% de la producción total del grupo y el 14% del EBITDA del segmento upstream.
Contraloría mantiene la auditoría y advierte riesgos financieros
El contralor Carlos Hernán Rodríguez confirmó que la auditoría sobre el Permian sigue en curso y que sus resultados se presentarán en diciembre. Recordó que cualquier venta de activos estratégicos “no depende de la voluntad del presidente ni del presidente de Ecopetrol”, sino de la Junta Directiva, que debe aprobarla con estudios técnicos y de impacto fiscal.
En su oficio, la Contraloría alertó que una eventual desinversión podría reducir el valor de las acciones de Ecopetrol hasta en 30% y afectar su sostenibilidad financiera. “El Permian es un activo representativo para los ingresos de la estatal y, por ende, para la Nación”, señaló el organismo de control.
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Reunión entre Petro y la Junta Directiva: tensiones por Permian y Reficar
El 5 de noviembre, el presidente Gustavo Petro se reunió en la Casa de Nariño con el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, y la Junta Directiva de la compañía. De acuerdo con W Radio, el encuentro abordó dos temas sensibles: el debate sobre el Permian y el posible embargo de la Refinería de Cartagena (Reficar) por parte de la Dian, derivado de un cobro de IVA de $1,3 billones correspondiente a los años 2022 y 2023.
La reunión se realizó una semana antes de la Asamblea Extraordinaria de Accionistas de Ecopetrol, convocada para el 11 de noviembre en Corferias, donde se discutirán modificaciones a los estatutos sociales y se espera un pronunciamiento sobre la estrategia internacional de la empresa.
USO y exdirectivos advierten sobre riesgos de vender el activo
El debate sobre la venta de las acciones de Ecopetrol en el Permian provocó una fuerte reacción sindical y técnica. La Unión Sindical Obrera (USO), históricamente cercana al Pacto Histórico, publicó un comunicado directo al presidente Petro: “Presidente, no permitiremos que Ecopetrol venda el Permian”, señaló el sindicato, al destacar que el 86% de la caja de la empresa proviene del negocio de petróleo y gas.
La USO recordó que, durante el actual gobierno, Ecopetrol ha entregado al Estado más de $138 billones en dividendos, regalías e impuestos. Por su parte, exdirectivos y exministros de Minas y Energía enviaron una carta a los organismos de control advirtiendo que una venta sería “un detrimento patrimonial injustificado”, pues las operaciones en Estados Unidos seguirían activas, pero el país perdería ingresos y aprendizaje tecnológico.
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Transición energética y rentabilidad: el dilema del Gobierno Petro
El presidente Petro ha defendido su política de transición energética como prioridad del Plan Nacional de Desarrollo. Según el mandatario, la participación en el Permian contradice la visión ambiental de su gobierno y prioriza un modelo dependiente de combustibles fósiles.
No obstante, los analistas subrayan que el Permian es el activo más rentable de Ecopetrol, con un margen EBITDA del 76%, frente al 35%-40% de los proyectos nacionales. Además, recordaron que el campo es una fuente crucial de transferencias fiscales y tecnológicas: mientras se debate la venta, el país aún no avanza en exploraciones clave como Uchuva-1, en el Caribe, pendiente de licencia ambiental.
Qué está en juego para Ecopetrol y el país
Por ahora, la venta del Permian está descartada, pero la polémica deja al descubierto las tensiones entre el discurso ambiental, las finanzas públicas y la autonomía empresarial. Si Ecopetrol mantiene su participación, asegurará una fuente clave de ingresos; si en el futuro se revisa su permanencia, deberá hacerlo con sustento técnico y consenso político.
El episodio reabre la discusión sobre la independencia de las empresas estatales frente al poder político y sobre cómo financiar una transición energética sin debilitar el principal motor fiscal del país.
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