¿Será secretaria de Educación de Bogotá Cecilia María Vélez, la exministra de Uribe? está en el equipo de empalme
La ADE, el sindicato filial de Fecode en Bogotá, ha manifestado públicamente su descontento ante la posible llegada a la Secretaría de Educación Distrital de Cecilia María Vélez White, quien fuera ministra de Educación en los gobiernos de Álvaro Uribe y a quien considera “la dama de hierro del uribismo”.
Vélez se vinculó el 9 de octubre a la campaña del alcalde electo de Bogotá, Carlos Fernando Galán.
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Hoy, Vélez fue incluida en el equipo de empalme entre la alcaldía actual y la de Galán, que comienza el primero de enero del año entrante, para tratar temas de educación, cultura y deporte. El proceso de empalme comenzará el próximo martes y estará dividido en mesas sectoriales.
De acuerdo con información del diario El Tiempo, fuentes cercanas a Galán han dicho que de ese grupo saldrán varios secretarios de despacho.
Por su parte, en días pasados la exministra expresó públicamente su interés en el sector educativo de la capital. Al respecto, afirmó lo siguiente:
“Bogotá le ha dado mucha prioridad a la educación, ha hecho muchas cosas en las distintas alcaldías y ha puesto recursos importantes para la educación.
Tenemos que exigir más porque no tenemos los problemas totalmente resueltos, adicionalmente tenemos el cambio demográfico que nos está ayudando. De manera que hay posibilidades de que avance mucho en estos cuatro años”.
Aunque Galán no ha dicho quiénes encabezarán las distintas secretarías distritales, sí se mostró complacido con la “llegada de Cecilia María Vélez al expreso Galán, esa apuesta para que Bogotá camine segura en educación”. Galán también manifestó que para él “es un orgullo tener su respaldo, sus ideas [y] su guía”.
Ella, por su parte, señaló que se identifica con “los planteamientos educativos de la campaña” y dijo que Bogotá puede “tener unos logros muy importantes en estos cuatro años”.
La inquietud de parte de los docentes y de sus organizaciones sindicales se origina principalmente en la tensa relación que Vélez mantuvo con el gremio educativo mientras ejerció como secretaria de Educación Distrital, durante la alcaldía de Antanas Mockus, y cuando dio el salto a ministra de Educación Nacional durante los dos periodos de Uribe, un tiempo récord de permanencia en el cargo.
Mano dura e inflexibilidad: entre las críticas a Cecilia María Vélez
Cecilia María Vélez, economista, magíster en Ciencias Económicas de la Universidad de Lovaina y exrectora de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, es una figura polémica en el mundo educativo.
Su trayectoria en la secretaría de Educación Distrital (de 1998 al 2002) y en el Ministerio de Educación Nacional durante los dos gobiernos de Uribe (2022-2010) suscita desconfianza entre los maestros, a la par que despierta elogios entre sectores críticos del magisterio colombiano.
En esos cargos, Cecilia María Vélez se ganó la reputación de ser intransigente ante las demandas de los maestros y las organizaciones sindicales del sector educativo. También fue conocida por tener una política de mano dura frente a las protestas de los docentes.
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El no pago de salarios como respuesta a la protesta social
Los maestros le reprochan a Cecilia María Vélez que, cuando fue secretaria de Educación Distrital y ministra de Educación, acudió al no pago de salarios para darle manejo a las protestas sociales contra medidas aprobadas por esas carteras.
El 20 de febrero de 2001, como secretaria de Educación de Bogotá, expidió la Resolución 713, “por la cual se ordena el no pago a los funcionarios que no laboren durante los ceses laborales” y la aplicó a los docentes que participaron en jornadas de protesta convocadas por las organizaciones sindicales del magisterio.
En el año 2007, ya como Ministra y en un momento crucial de su trayectoria, Vélez tuvo que hacer frente a un paro que se extendió por varias semanas en contra del Gobierno y, en particular, de la denominada “Revolución Educativa” de Uribe.
Los maestros exigían frenar lo que consideraban la privatización de la educación pública y recuperar las garantías laborales que habían perdido en años anteriores de ese Gobierno.
En respuesta a esas protestas, la entonces ministra Vélez volvió a acudir al no pago de salarios. En esa ocasión, anunció un decreto que contemplaba la suspensión de los salarios de los maestros que participaran en las movilizaciones.
Su posición fue tajante: “No tenemos nada qué negociar”, declaró a Caracol Radio. Esta postura generó controversia y polarización en el ámbito político, educativo y sindical.
Mientras algunos elogiaban a la Ministra por tomar medidas firmes en un momento de agitación social, otros la criticaban por lo que consideraban una falta de disposición al diálogo y la negociación con el sector educativo.
¿En qué consistió la política educativa de Cecilia María Vélez en Bogotá?
Durante su tiempo como secretaria de Educación Distrital, Vélez implementó una serie de acciones destinadas a “imponer orden”. Esto llevó a una ruptura en la comunicación con el sindicato de maestros.
Entre esas medidas sobresalen los despidos masivos de personal de servicios (aseo, vigilancia, catering, servicios informáticos, sistemas de información y de matrículas). Como resultado, más de 3.000 funcionarios dejaron de ser empleados públicos y pasaron a tener contratos de prestación de servicios a través de procesos de flexibilización laboral y outsourcing.
En la Secretaría también fueron conocidos los “Planes de mejoramiento” anuales con indicadores medibles. En ese marco, se establecieron sistemas de estímulos y sanciones vinculados a la evaluación y el seguimiento de las instituciones educativas, que los maestros reprocharon por considerar autoritarios.
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Exclusión de los maestros del 1278 del régimen especial
Además de la inflexibilidad que caracterizó a Cecilia María Vélez en su paso por la Secretaría de Educación Distrital, los docentes han criticado su gestión en el Ministerio y especialmente su aplicación de la política educativa liderada por el Gobierno de Álvaro Uribe Vélez, la cual fue conocida como la “Revolución Educativa”.
Según varios comunicados públicos de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) de la época, esta política condujo al desmantelamiento del régimen especial docente en pensiones, carrera docente y salud para los docentes que se rigen por el Estatuto 1278 de 2002.
En efecto, durante su ministerio todos los educadores nombrados a partir del 26 de junio de 2003 fueron excluidos del régimen pensional especial del magisterio y trasladados al régimen general de pensiones establecido en la Ley 100 de 1993 y en la Ley 797 de 2003.
En lo que se refiere a la edad de pensión, esta dejó de ser los 55 años, como ocurre con los docentes del Estatuto 2277, y pasó a ser de 57 años, sin importar si se trata de hombres o de mujeres.
Asimismo, los docentes del Estatuto nuevo (1278) perdieron la compatibilidad entre pensión y salario que disfrutan los maestros del Estatuto viejo (2277), la cual les permite seguir dedicándose a la labor docente una vez se han pensionado y hasta que cumplen la edad de retiro forzoso.
La reforma a las transferencias impactó en la educación pública básica y media
La reforma a las transferencias territoriales, aprobada en 2007, durante la gestión de Cecilia María Vélez como Ministra del segundo periodo de Uribe, recortó los recursos destinados a la educación pública, la salud, el agua potable y el saneamiento básico.
Según el secretario de Fecode en ese entonces, Raúl Arroyave (qepd), en educación la reforma derivó en el cierre y la fusión de establecimientos educativos, la eliminación de vacantes de cargos directivos, el incremento de la relación alumno/maestro, la eliminación del preescolar de tres grados, la abolición de las políticas de bienestar estudiantil y el congelamiento del escalafón docente para los docentes nuevos, entre otras.
Su gestión y enfoque durante la Secretaría de Educación de la capital colombiana y los dos gobiernos de Uribe siguen siendo temas de debate y reflexión en la actualidad, especialmente en el contexto de su posible participación en la administración del alcalde electo de Bogotá, Carlos Fernando Galán.
En la actualidad, la Secretaría de Educación del Distrito cuenta con un presupuesto de 3,8 billones de pesos, según la Contraloría. Hay 406 instituciones educativas (745 sedes) y 765.102 estudiantes con matrícula oficial registrada en el Sistema Integrado de Matrícula, SIMAT.
