Productos importados de la canasta básica tendrán arancel cero durante 6 meses

El día de ayer (3 de marzo), el Gobierno Nacional, en cabeza del ministro de Hacienda y Crédito Público, José Manuel Restrepo, y de la ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Ximena Lombana, expidió el Decreto 307, mediante el cual se “modificó parcialmente el Arancel de Aduanas para la importación de productos que inciden en la canasta de consumo de los hogares”. 

(Le puede interesar: 8 años consecutivos de números rojos para la balanza comercial colombiana)

En términos concretos, la medida del Gobierno redujo a 0% el arancel de 165 subpartidas, durante seis meses, con el objetivo “de disminuir el impacto del alza de precios en el bolsillo de los consumidores colombianos”. Estos bienes, de acuerdo con MinCIT, “tenían aranceles de 5%, 10% y, en algunos casos, del 15%”.

Las siguientes son algunas de las subpartidas que recibirán este tratamiento arancelario: 

• Alimentos y bebidas
• Harinas
• Cereales
• Semillas para productos agrícolas
• Aceites esenciales
• Diferentes tipos de papel
• Extracto de malta
• Hidrolizados de proteínas
• Autolizados de levadura
• Mejoradores de panificación
• Complementos alimenticios
• Granos trabajados de avena
• Papel higiénico
• Pañuelos y toallitas de papel
• Algunas herramientas

Así mismo, para dos de estas subpartidas —Extractos de maltas y Otros cereales—, y también por 6 meses, se suspendió la aplicación del Sistema Andino de Franja de Precios.

La medida se da en un contexto de aumento sostenido de las importaciones. Según el DANE, entre 2020 y 2021 las importaciones se incrementaron un 37%, lo cual provocó un aumento de 5.295 millones de dólares en el desequilibrio comercial del país. Debido a la fuerte devaluación del peso, los productos importados han presentado un encarecimiento significativo. 

(Le puede interesar: ¿Estados Unidos está regresando al viejo proteccionismo?)

Gobierno explica las razones para implementar esta medida

En el decreto publicado, el Gobierno explicó las principales razones para tomar dicha medida. Señaló que en enero de 2022, mientras la inflación nacional mensual se ubicó en 1,67%, la inflación anual registró una cifra de 6,94%, y las peores presiones “recayeron en el sector de alimentos y bebidas no alcohólicas, alojamiento y servicios públicos”.  

(Le puede interesar: Altos precios mundiales de alimentos: ¿ventaja o problema para Colombia?)

En el caso específico del sector de Alimentos y bebidas no alcohólicas, el documento reportó una inflación anual de 19,94%, la cual atribuyó, principalmente, al incremento en los precios de la papa, la carne de res, el plátano, la leche y las frutas. Lo anterior, de acuerdo con las carteras de Hacienda y de Comercio, fue provocado por el encarecimiento de los insumos agropecuarios, así como por la ola invernal que se vivió en todo el país, la cual que ha afectado “el ciclo productivo agrícola” y “restringido la oferta interna de algunos de estos bienes”. 

(Lea también: Alimentos balanceados y herbicidas: los insumos agropecuarios en los que más productos se han encarecido)

Adicionalmente, el decretó registró que, en enero de 2022, los hogares en condición de vulnerabilidad y pobreza reportaron las mayores tasas de inflación anual (8,31 % y 8,29%, respectivamente), superando la tasa de inflación de los hogares de clase media (7,13%) y de ingresos altos (5,56%). Lo anterior, de acuerdo con el documento, obedece a la mayor participación del sector de Alimentos y bebidas no alcohólicas en la canasta de consumo de los hogares pobres y vulnerables.
Según indicó el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, con dicha modificación parcial y transitoria del Arancel de Aduanas “se empezará a hacerle frente a un fenómeno que están viviendo varios países en el mundo. Confiamos en que las expectativas de inflación empiecen a anclarse y comencemos a ver en los próximos meses una reducción en el costo de vida de los ciudadanos”. Por su parte, la ministra de Comercio, María Ximena Lombana, afirmó que la medida ayudará a “aliviar en parte el bolsillo de los colombianos, especialmente de los hogares menos favorecidos”.