Según MinMinas, Colombia podría competir globalmente en la producción de hidrógeno azul y verde
El Ministerio de Minas y Energía (MinMinas) dio a conocer la Hoja de ruta del hidrógeno en Colombia, que analiza la capacidad de producción, la demanda a nivel nacional y el potencial exportador del país. Según Diego Mesa, ministro de Minas, la introducción del hidrógeno a la matriz energética es clave en la reducción de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), en el despliegue de fuentes no convencionales de energía renovable y en los compromisos ambientales que el país ha venido asumiendo desde hace algunos años. Adicionalmente, la versatilidad de este elemento en el sector industrial tendría efectos económicos positivos.
El auge del hidrógeno en la economía global
Según la Hoja de ruta de MinMinas, el hidrógeno está en auge en el mundo gracias a su versatilidad. Al ser uno de los elementos más reactivos de la tabla periódica, no se encuentra libre en la naturaleza, sino combinado con otras moléculas. Para su extracción, se requiere un proceso manufacturero de separación. Dependiendo de este, se pueden obtener distintos tipos de hidrógeno:
- Hidrógeno gris: aquel que se obtiene a partir de combustibles fósiles, como el gas natural y el carbón.
- Hidrógeno azul: aquel que se obtiene también a partir de combustibles fósiles, pero sin liberación de dióxido de carbono (CO2). Este hidrógeno está incluido dentro de las fuentes no convencionales de energía.
- Hidrógeno verde: aquel que se obtiene de fuentes no convencionales de energía renovable, como la biomasa, la energía eólica, la solar y el calor geotérmico, entre otras.
De acuerdo con los datos proporcionados por MinMinas, “el papel del hidrógeno de bajas emisiones y sus derivados en la descarbonización de múltiples sectores ha despertado el interés de las principales economías”. Actualmente, 30 países han desarrollado sus propias hojas de ruta. De hecho, la Comisión Europea anunció un ambicioso plan que movilizará entre 180 y 470 billones de euros de financiación público-privada para investigación y desarrollo de nuevas tecnologías y para la instalación de plantas generadoras de hidrógeno verde. Varios países se han sumado a los incentivos. Alemania y Francia crearon programas de financiación por 9 billones de euros cada uno. Además, Japón y Corea del Sur destinarán 19 y 2,4 billones de dólares, respectivamente, a la financiación de proyectos relacionados con la obtención de hidrógeno.
A febrero de 2021, se había anunciado a nivel mundial la puesta en marcha de cerca de 228 proyectos relacionados con la producción y obtención de hidrógeno. Con esta cifra, destacó la Hoja de ruta de MinMinas, se espera un rápido crecimiento de la demanda global de hidrógeno en varios sectores económicos.
En el sector de transporte, el hidrógeno podría ser clave para sustituir los combustibles fósiles. En el sector industrial podría reducir significativamente las emisiones y servir de materia prima para procesos como la refinación, la producción de acero y vidrio, la fabricación de explosivos para minería y el procesado de grasas. En el sector eléctrico, podría facilitar una mejor integración de las energías renovables no convencionales, así como aportar a la calefacción y al calentamiento de agua en el sector residencial y comercial.
El potencial de Colombia en la producción de hidrógeno
Según la Hoja de ruta que realizó MinMinas, “Colombia es un país privilegiado en cuanto a la diversidad y disponibilidad de recursos naturales que cubren sus necesidades energéticas actuales y que sientan las bases para la producción futura de hidrógeno de bajas emisiones”.
De acuerdo con MinMinas, son dos las razones que hacen de Colombia un país con potencial para la producción de hidrógeno. En primer lugar, el país dispone de importantes reservas de petróleo, carbón y gas natural —especialmente, en los Llanos Orientales, La Guajira y el Valle Inferior de Cartagena— que podrían usarse para la producción de hidrógeno azul.
En segundo lugar, Colombia alberga recursos para la generación de energía renovable, de los que podría obtenerse hidrógeno verde. Por ejemplo, la oferta hídrica de Colombia es seis veces superior al promedio mundial y tres veces superior al promedio de América Latina. Además, los recursos eólicos y solares son abundantes en el norte del país. “Estas condiciones posibilitarán costos de producción de hidrógeno verde similares a los obtenidos a partir de fuentes fósiles desde finales de la presente década y que resultarán competitivos a nivel global”, declaró la Hoja de ruta que realizó MinMinas.
MinMinas espera que la puesta en marcha de este proyecto, entre 2020 y 2050, aumente de forma exponencial la demanda total de hidrógeno de bajas emisiones en el país. De acuerdo con las proyecciones del Ministerio, el sector industrial, motivado por el compromiso con la descarbonización y la reducción de Gases de Efecto Invernadero, será el primer y mayor demandante a nivel interno, sobre todo en actividades relacionadas con la refinación de combustibles y la producción de fertilizantes. Por su parte, se espera que, desde 2026, el sector del transporte comience a demandar este tipo de energía, especialmente en el transporte terrestre pesado (autobuses y camiones) y en el transporte público.
En cuanto al mercado externo, el Ministerio le confiere un alto potencial al proyecto. Gracias a sus recursos renovables, Colombia podría competir en los mercados internacionales del hidrógeno de bajas emisiones y ser un país exportador. Según las cifras de MinMinas, en el largo plazo es posible que el hidrógeno genere ingresos similares a los que actualmente genera el carbón por concepto de exportaciones (5 billones de dólares).