¿Cómo hacer trading paso a paso?
¿Qué es exactamente el trading?
Se conoce como trading o comercialización el acto de comprar y vender activos financieros con el objetivo de obtener beneficios económicos a corto, mediano o largo plazo. Esto implica que el trader u operador puede beneficiarse de las especulaciones sobre los precios de la gran variedad de productos.
Esta actividad requiere capitalizar los cambios en el precio de un activo determinado, los cuales se producen en cuestión de segundos, minutos u horas como las criptomonedas. Pero, existen otros cuyo valor puede variar o mantenerse estable por más tiempo. En todo caso, se hace trading para obtener ganancias.
Sin embargo, estas ganancias no salen de la nada. Para ello, los operadores emplean diversas técnicas de análisis técnico y fundamental, además de herramientas como la aplicación para teléfonos móviles como MetaTrader 4 móvil, la cual ofrece información sobre cada mercado, gráficos y elementos que permiten hacer un estudio, antes de realizar cualquier transacción.
Ahora bien, es posible hacer trading u operar con diversos activos financieros. Entre ellos están las acciones, las materias primas, índices bursátiles, las divisas o mercado Forex y criptodivisas, criptomonedas o activos digitales.
Empezar a hacer trading: lo que hay que saber
Tomar las decisiones adecuadas y empezar a operar requiere muchos conocimientos y habilidad. Además, hay varias formas de empezar dependiendo de los objetivos personales y financieros. Estos son los pasos a seguir para hacer trading:
1.- Conocer los fundamentos del trading y de los mercados
Es esencial comprender el funcionamiento de los diversos mercados financieros antes de dedicarse al trading. Entonces, hay que comenzar a familiarizarse con las ideas más fundamentales. Entre estas están cómo generar ingresos en este paso, las diferencias en cada mercado, saber cómo funciona la oferta y la demanda, cómo se establecen los precios de cada activo en su propio mercado y cómo se llevan a cabo las órdenes de compra y venta.
También es imprescindible investigar y conocer todos los tipos de mercado, incluidas las materias primas, acciones, Forex, derivados y/o criptodivisas.
No se puede empezar nada sin antes dedicar tiempo a estudiar todo lo que se pueda sobre mercados financieros y sus movimientos. Otra cosa importante es tener claro que cada mercado tiene riesgos y beneficios y que no todos ofrecen las mismas oportunidades para empezar.
2.- Aprender todo sobre riesgos y beneficios
El trading, como cualquier tipo de inversión, puede salir bien o mal. Siempre es arriesgado. Es importante que se comprenda esto y se esté muy claro antes de comenzar a comercializar.
Por eso, hay que informarse bien de las potenciales, de los sectores más volátiles, la naturaleza errática de algunos mercados y la importancia de la gestión del riesgo para la rentabilidad. Asimismo, es bueno contar con la aplicación MetaTrader 5 móvil que proporciona gráficos, herramientas de analítica y descripción de los mercados y sus particularidades.
Al mismo tiempo, el trading ofrece una serie de ventajas y perspectivas diferentes que se deben tener en cuenta. Entre las que se incluye la posibilidad de obtener recompensas económicas, así como la adquisición de habilidades útiles no solo para el comercio, sino para la vida cotidiana. Haciendo trading de manera consciente, sistemática y cuidando la inversión se puede disponer de tiempo, dinero y de la ansiada libertad financiera.
3.- Establecer las metas del trading
Se deben determinar los objetivos financieros que se persiguen antes de empezar a invertir. En esto hay que ser realista y razonable. Lo mejor es hacerlo a corto, mediano y largo plazo. Tener en cuenta esto se hace preguntándose: “¿hago trading para ganar un dinero extra, ahorrar para un determinado proyecto a futuro o independizarme económicamente?” Con las metas claras en mente se estará más motivado y centrado a lo largo del proceso.
4.- Conocer el mercado en el cual se va a invertir
En los mercados financieros se puede operar con una gran variedad de activos. No todos son adecuados para todo tipo de operadores. Esto se debe a las diferencias en cuanto a riesgo y volatilidad. Por ejemplo, algunos activos requieren más capital para operar, mientras que otros pueden negociarse con menos.
Asimismo, hay algunos activos más riesgosos que otros. Tal es el caso de las criptomonedas versus las acciones de ciertas empresas. Hay que destinar algún tiempo a conocer e investigar el activo con el que se desea operar.
De igual manera, conviene estudiar la economía de los países participantes en el marco de la transacción y las variables económicas que pueden influir en los tipos de cambio si el interés es operar con divisas. En este punto es fundamental encontrar el valor del activo que se ajuste a los objetivos financieros, lo que se persigue y a las capacidades económicas.
5.- Establecer una estrategia
Hay que decidir qué tipo de estrategia de negociación se va a utilizar antes de operar en los mercados. Esa directriz proporcionará la técnica de negociación adecuada que se utilizará. A su vez, esto hace posible ponerse las normas para hacer o deshacer las operaciones. Pero, es importante saber que cada estrategia se tiene que adaptar a las habilidades, experiencia y uso de indicadores de cada operador.
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