Así es como las botas de San Polos, en el Restrepo, terminaron vistiendo a la Policía Montada de la Florida
Desde hace tres años, la empresa colombiana de calzado, San Polos provee botas a la Policía Montada del Estado de Florida, en Estados Unidos. Esta es la historia contada por Gloria Elena Sandoval, hija de los fundadores y copropietaria de la empresa.
A nivel mundial, el negocio del calzado mueve miles de millones de dólares cada año. Solo en Colombia, el mercado del calzado movió 3,67 billones de pesos en 2023, de acuerdo con el Observatorio de Calzado y Marroquinería del gremio Acicam. Sin embargo, lo que tiene este mercado millonario también lo tiene de competido, y son muchas las empresas que no logran mantenerse en el sector.
El caso de San Polos, una empresa familiar colombiana fundada en 1992 por doña María Suárez y su hijo, Agustín Sandoval, es muy especial.
San Polos ha recorrido un largo camino desde sus humildes inicios en un pequeño espacio al interior del hogar. Con una trayectoria marcada por la experiencia, el ensayo y el error, esta empresa ha logrado destacarse en el mercado del calzado tanto a nivel nacional como internacional.
Desde hace tres años, la empresa consiguió lo que muchas apenas sueñan, y provee botas a la Policía Montada (a caballo) del Estado de Florida, en Estados Unidos. Este logro se dio en el marco de la Feria Internacional del Cuero, Calzado y Marroquinería, que se realizó en Bogotá en el año 2019.
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Además de los Estados Unidos, San Polos exporta regularmente a países como México, Chile y Ecuador. Entre el 15% y el 20% de su producción total se destina a la exportación.
Pero ¿cómo logró esta empresa familiar crecer y convertirse en lo que es hoy?
Diversificación de productos y formas de trabajo de San Polos
Con más de tres décadas en el mercado, San Polos se ha especializado en la manufactura de calzado, inicialmente orientada hacia el segmento masculino.
En los últimos años ha diversificado su portafolio de productos para incluir también el calzado femenino. Y, además de la fabricación, la empresa ha incursionado en la comercialización de sus productos, con la apertura de 17 tiendas en Bogotá.
Gloria Elena Sandoval, hija de los fundadores y copropietaria, destaca que la empresa no se limita a la venta directa en sus tiendas, sino que también realiza maquilas, exportaciones y cuenta con aproximadamente 120 puntos de venta en la modalidad de consignación.
Todo esto ha permitido que la empresa genere un poco más de 100 empleos, 85 empleos directos y, en modalidad satélite, aproximadamente 30 más.
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Informalidad de la competencia y poco acceso al crédito, la piedra en el zapato
A pesar de su crecimiento y consolidación, la industrial del calzado enfrenta diversos desafíos en el mercado.
Uno de los principales es la competencia desleal de empresas informales. Estas empresas representan una amenaza debido a que, al no cumplir con las regulaciones laborales ni con todas las obligaciones tributarias, tienen costos de producción más bajos y, en consecuencia, pueden vender sus productos más barato.
En cuanto a la competencia de empresas que hacen parte del sector formal de la economía, la empresa ha logrado posicionarse ofreciendo productos de calidad a precios competitivos.
Sin embargo, Gloria Elena afirma que la falta de apoyo estatal y el difícil acceso al crédito son obstáculos que limitan su crecimiento y desarrollo tecnológico.
Al respecto, señala que, aunque existen entidades como Bancóldex, acceder a sus créditos es complicado y requiere cumplir con una serie de requisitos que muchas veces resultan inalcanzables para las pequeñas y medianas empresas.
Asimismo, modernizar la maquinaria e implementar mejoras tecnológicas son aspectos claves para la competitividad, pero los altos costos de estas inversiones representan un desafío adicional.
Para seguir avanzando
Luego de más de 30 años de fundada, la historia de San Polos es un claro ejemplo del esfuerzo, la dedicación y la creatividad que se requieren para sobresalir en un mercado tan competitivo como el del calzado.
Gloria Elena espera que problemas como los de la competencia desleal y la falta de acceso al crédito puedan resolverse, y que sus zapatos conquisten cada vez más mercados.