¿Le pueden quitar el saldo? Las 3 razones por las que su tarjeta TuLlave puede ser desactivada
Miles de usuarios podrían perder el saldo de su tarjeta TuLlave si no cumplen ciertas condiciones de uso establecidas por TransMilenio. Le contamos.
La tarjeta TuLlave, herramienta esencial para el acceso al sistema de transporte masivo de Bogotá, TransMilenio, puede ser desactivada sin devolución de saldo en tres situaciones concretas.
Así lo advirtieron recientemente las autoridades encargadas de la operación del sistema, señalando que miles de usuarios podrían quedar sin fondos si no cumplen con ciertos requisitos.
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Pérdida de la tarjeta TuLlave no personalizada
Uno de los principales motivos de desactivación de la tarjeta TuLlave es la pérdida del plástico cuando no ha sido previamente personalizado. En estos casos, la empresa Recaudo Bogotá, encargada de la administración del sistema de recaudo, informa que no es posible devolver el saldo disponible.
La razón es la imposibilidad de identificar al titular de la tarjeta y, por tanto, de hacer una restitución del dinero. Este saldo pasa a lo que la empresa denomina “listas negras”.
Los usuarios que compran y utilizan la tarjeta TuLlave sin personalizarla no cuentan con ninguna protección en caso de extravío. Por tanto, la recomendación operativa es mantener el control físico del medio de pago o, en su defecto, optar por su personalización para garantizar respaldo financiero en este tipo de situaciones.
Inactividad por más de dos años
Otro escenario en el que la tarjeta TuLlave puede ser desactivada ocurre cuando el plástico tiene más de cinco años desde su emisión y, además, no ha sido utilizado en los últimos dos años. Bajo esta condición, Recaudo Bogotá considera que la tarjeta ha salido de circulación activa y procede con su bloqueo automático.
La consecuencia directa de esta medida es la pérdida total del saldo que aún conserve la tarjeta. Este procedimiento forma parte del proceso de depuración del sistema, que busca mantener operativas únicamente aquellas tarjetas que están siendo utilizadas de manera regular dentro del sistema TransMilenio y el SITP.
Venta ilegal o uso fraudulento
La tercera causa que puede llevar a la inhabilitación de la tarjeta TuLlave es la sospecha de uso indebido. Entre las prácticas que han sido detectadas por el sistema de monitoreo de Recaudo Bogotá se encuentran la reventa de pasajes o el préstamo de tarjetas con beneficios, conductas que violan las normas del sistema.
Para este fin, TransMilenio ha implementado un algoritmo que detecta patrones de uso anómalos. Si se identifica un comportamiento sospechoso, la tarjeta es bloqueada de manera inmediata, incluso si está personalizada o asociada a un beneficiario legítimo de subsidios.
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Ventajas operativas de la personalización
La empresa reitera la importancia de personalizar la tarjeta TuLlave como medida preventiva ante cualquier eventualidad. Este procedimiento no solo permite recuperar el saldo en caso de pérdida, sino que también habilita funcionalidades adicionales que facilitan el uso del sistema.
Entre los beneficios que ofrece la personalización se encuentran:
- Posibilidad de realizar transbordos sin costo adicional durante una ventana de 125 minutos.
- Acceso a un sistema de crédito de emergencia, que permite utilizar dos pasajes incluso si no se cuenta con saldo disponible.
- Recuperación de saldo ante pérdida o robo de la tarjeta.
El proceso de personalización puede llevarse a cabo de manera virtual o presencial. Para ello, el usuario debe contar con un documento de identidad válido y registrar sus datos en el sistema. Solo es posible personalizar una tarjeta por persona.
¿Qué puede generar estas nuevas medidas?
Según datos del sistema, TransMilenio procesa más de 4 millones de viajes diarios, lo que evidencia la relevancia de la tarjeta TuLlave en la movilidad urbana de la capital. Sin embargo, los recientes ajustes en las condiciones de uso de la tarjeta implican nuevas responsabilidades para los usuarios.
La pérdida del saldo por desactivación de la tarjeta TuLlave puede ser un perjuicio económico directo para los ciudadanos, especialmente si se considera el reciente aumento del valor del pasaje a $3.200 pesos por trayecto. Ante esto, las autoridades insisten en la necesidad de estar atentos a los movimientos de su tarjeta, evitar prácticas irregulares y mantenerla activa mediante su uso frecuente.
La tarjeta TuLlave seguirá siendo indispensable para el uso del sistema integrado de transporte de Bogotá. No obstante, su correcto uso y personalización resultan clave para evitar la pérdida de beneficios y de saldo acumulado.
