Colombia ingresa al Banco de los BRICS, pero aún debe concretar su aporte de capital
El banco de los BRICS —o Nuevo Banco de Desarrollo (NBD), que es su nombre oficial— exige a los países miembros suscribir acciones del capital autorizado para consolidar su participación. Colombia ya expresó su intención, pero aún no hay anuncios claros de cuando se materializaría el desembolso.
El ingreso de Colombia al NBD —una institución multilateral con sede en Shanghái— ha sido recibido con expectativa en el escenario internacional. Sin embargo, más allá del anuncio político, el país aún debe cumplir con aportar el capital comprometido. Sin esta suscripción efectiva de acciones, la membresía en el banco no se consolida plenamente.
A continuación, le contamos qué es el banco de los BRICS, cómo es la composición de capital y el fondo de reserva de esta entidad, el aporte de capital que realizará Colombia para ingresar y qué le espera al país después de este anuncio:
¿Qué es el Nuevo Banco de Desarrollo (NBD)?
Fundado en 2014 por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica (el grupo BRICS original), el NBD fue concebido como una alternativa al dominio occidental en organismos multilaterales de financiación como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Su objetivo, como banco de los BRICS, es financiar proyectos, por ejemplo de infraestructura.
El capital autorizado del banco asciende a USD $100.000 millones, de los cuales se han suscrito inicialmente USD $50.000 millones, distribuidos en partes iguales entre los cinco países fundadores.

Le puede interesar: De la Séptima Papeleta a la Asamblea Constituyente de Petro: diferencias, similitudes y límites constitucionales
Composición del capital y el fondo de reserva del banco de los BRICS
La composición de capital del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) de los BRICS está diseñada para garantizar tanto la equidad entre sus miembros fundadores como la estabilidad financiera de la institución. Al momento de su creación, se estableció un capital autorizado inicial de USD $100.000 millones, aunque solo la mitad de esa suma fue suscrita en una primera etapa.
El capital inicial suscrito al banco de los BRICS asciende a USD $50.000 millones, aportados de forma equitativa por los cinco países fundadores: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Cada uno comprometió USD $10.000 millones, asegurando así una distribución igualitaria en la toma de decisiones iniciales del banco. Sin embargo, este capital está proyectado a incrementarse eventualmente hasta alcanzar los 100.000 millones de dólares.
Una particularidad importante del esquema de gobernanza es que ningún país puede aumentar su participación sin la aprobación unánime de los otros cuatro miembros fundadores, una condición introducida por India. Esta cláusula busca evitar que un solo país domine la institución a través de mayores aportes de capital.
Adicionalmente, el banco de los BRICS cuenta con un fondo de reserva conocido como Acuerdo de Reservas de Contingencia (ARC), creado con el objetivo de mitigar presiones de liquidez a corto plazo. Este fondo también está valorado en USD $100.000 millones. China es el mayor contribuyente al fondo de reserva, con una participación de USD $41.000 millones. Le siguen Rusia, Brasil e India, que aportan USD $18.000 millones cada uno, y Sudáfrica, con USD $5.000 millones.
En términos de gobernanza ampliada, el NBD permite el ingreso de nuevos países miembros, siempre que se respete una condición clave: la participación accionaria conjunta de los BRICS debe mantenerse por encima del 55%. Esta norma asegura que los fundadores conserven el control del banco, incluso ante futuras expansiones de su base de miembros.

Le puede interesar: Desigualdad en la educación y tecnología digital: el BID alerta sobre las barreras que experimentan los estudiantes de América Latina en la época de la digitalización
El aporte de capital de Colombia
Colombia se convirtió recientemente en uno de los países miembros adheridos al banco de los BRICS, junto con Bangladés, Egipto, Argelia y Emiratos Árabes Unidos. No obstante, el ingreso al banco no se hace efectivo sin la correspondiente suscripción de acciones del capital autorizado. En el caso colombiano, el gobierno se comprometió a aportar USD $512,5 millones, divididos en dos componentes:
- USD $410 millones como capital exigible (es decir, a ser pagado cuando el banco lo solicite).
- USD $102,5 millones como capital pagado en efectivo, equivalentes a cerca de COP $2,1 billones.
Hasta el momento, este desembolso no se ha hecho efectivo, por lo que Colombia aún no ha consolidado su condición de miembro pleno del banco, a pesar del anuncio político y diplomático.
¿Ser parte del NBD, o banco de los BRICS, es lo mismo que ser parte del BRICS?
Una aclaración fundamental: ser miembro del Nuevo Banco de Desarrollo no equivale a ser miembro pleno del bloque BRICS. Son procesos distintos, aunque relacionados. Mientras que el ingreso al banco implica el compromiso de aportar capital, la adhesión al grupo BRICS conlleva condiciones políticas, como no imponer sanciones a otros miembros, pero no exige necesariamente una contribución económica directa.

¿Qué viene para Colombia?
El ingreso al banco de los BRICS representa una oportunidad para Colombia de acceder a financiación para proyectos de infraestructura y transición energética, en condiciones potencialmente más favorables que las ofrecidas por organismos tradicionales. Sin embargo, la viabilidad de esta relación depende de la concreción del aporte comprometido.
En un contexto de restricciones fiscales, la ejecución de este aporte —equivalente a cerca de 2,1 billones de pesos— podría enfrentar resistencia interna, especialmente si se prioriza el gasto social o se buscan recortes presupuestales.
Por lo pronto, no está claro cuáles serían las propuestas que Colombia llevaría al Banco de los BRICS, pues en el viaje de Petro a China quedó claro que, mientras otros países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) tenían claros sus posibles aportes, Colombia aún no había proyectado nada de manera concreta.
Siga leyendo: Reforma pensional: decisión de la Corte Constitucional pone en aprietos el Marco Fiscal de Mediano Plazo