El Gobierno le pidió a la Federación Nacional de Cafeteros vender las instalaciones de Tokio y Nueva York
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, llamó a la austeridad a la Federación Nacional de Cafeteros.
En concreto, se refirió a las costosas instalaciones que tiene la Federación en Tokio y Nueva York, y pidió que estos activos sean vendidos, para que los dineros recibidos pasen a estar a disposición de los cafeteros.
Le puede interesar: Insólito, en 2022 Colombia exportó más café del que produjo: habría fraude con importaciones de café
El ministro Bonilla nombró directamente a la Federación Nacional de Cafeteros, al decir que “es hora de que la Federación se adelgace administrativamente. Algunos cargos internacionales no tienen mucha razón de existir. El país tiene un esfuerzo diplomático grande y hay otras estructuras a las cuales la Federación o el mundo cafetero puede acogerse”.
Para ver completo el discurso, de 1:18 segundos, puede hacer clic en este enlace:
Por ahora, la Federación Nacional de Cafeteros no se ha pronunciado al respecto.
Los problemas del sector cafetero
El sector cafetero de Colombia enfrenta una de las crisis más desafiantes en su historia, debido a varios factores.
Entre ellos, sobresalen la brusca caída de los precios del café desde agosto del año pasado, la disminución en el área cultivada durante la última década, la escasa renovación de los cafetales, la falta de mano de obra, la crisis de los contratos de venta de café a futuro y los problemas que atraviesan las cooperativas de caficultores.
Después de un período de bonanza en 2020 y 2021, el precio interno del café ha experimentado una pronunciada caída, del 43%, en el último año. En agosto de 2022, se situaba por encima de los $2,5 millones por carga, mientras que en septiembre de 2023 llegó a los $1,3 millones, aseguró Jhenifer Mojica, ministra de Agricultura y Desarrollo Rural.
La determinación del precio interno del café se compone de tres variables exógenas: la cotización de la libra de café en la Bolsa de Nueva York, la Tasa Representativa del Mercado y la prima del precio del café.
Según Óscar Bernal, subsecretario técnico del Fondo de Estabilización de Precios del Café, el contrato C ha retrocedido cerca del 20% en lo que va de año, la tasa de cambio ha presentado una revaluación del 17% (pasó de $4.800 a $4.000), y el diferencial de calidad se ha reducido de USD $0,50 a USD $0,20.
El sector también ha sufrido el impacto de las importaciones, con 2,1 millones de sacos importados entre agosto de 2022 y el mismo mes de 2023, de acuerdo con la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica.
Aurelio Suárez, de la Academia Colombiana de Ciencias Económicas, destacó la necesidad de aumentar los aranceles al café importado para incentivar a los productores nacionales.
Lea también: El exportador de la semana: Aprokafés, la empresa antioqueña cuyos cafés especiales se toman hasta en Australia
El gerente de la Federación Nacional de Cafeteros también se refirió al tema. Bahamón subrayó la importancia de abordar las desigualdades en el comercio internacional, donde Colombia enfrenta aranceles bajos o nulos, mientras que países como México o Brasil prohíben las compras de café colombiano.
Bonilla responsabilizó a la Federación Nacional de Cafeteros por los contratos de venta de café a futuro
Hace unas semanas, durante un debate en la Cámara de Representantes, se habló de las 500.000 familias afectadas por los bajos precios del café.
A ese encuentro asistieron, entre otros, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla; el presidente de la Federación Nacional de Cafeteros, Germán Alberto Bahamón, y la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica.
Allí se debatieron las problemáticas que afectan al sector y se le pidió al gobierno nacional una mayor inversión en dicho sector.
Ante esta situación, el ministro Bonilla dijo que la crisis del sector se debe sobre todo a la quiebra de las cooperativas, por cuenta de la crisis que han suscitado los incumplimientos de los contratos de venta de café a futuro, y manifestó que la Federación Nacional de Cafeteros es una de las principales responsables.
“Los dejaron que hicieran un contrato con un gran comprador, y no les advirtieron o no les dieron la asesoría. Entonces, ¿dónde está la capacidad técnica de la Federación? ¿dónde estaba? La Federación es la culpable de la quiebra de las cooperativas y es la culpable de que los cafeteros hayan perdido credibilidad en el mercado de futuro”, señaló Ricardo Bonilla en el pasado debate.
Según Aurelio Suárez, a diciembre de 2022, de las 33 cooperativas que participaron en los contratos de futuros, 14 se encontraban en números rojos. Asimismo, la Contraloría encontró 29 hallazgos administrativos en 2022, lo que subraya la gravedad de la situación.
Por su parte, el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros se defendió diciendo que, “de 34 cooperativas, hoy 33 todavía están en buenas condiciones y ejerciendo la garantía de compra en cada una de las regiones cafeteras. Esto ha sido ese trabajo, un trabajo en el que hemos venido articulando esfuerzos y compartiendo información”.
Las compras de café futuro del contrato C también presentan problemas, con 1.900 fijaciones en incumplimiento de las 24.912 posiciones abiertas en la Bolsa de Nueva York, según Oscar Bernal, subsecretario técnico de Fondo de Estabilización de Precios del Café.
Esto ha afectado significativamente los recursos públicos del Fondo Nacional del Café (FoNC), que es una cuenta parafiscal alimentada por la contribución cafetera que se paga por cada libra de café, según explica la Federación Nacional de Cafeteros.