Incertidumbre y desaceleración económica: el difícil panorama para fijar el salario mínimo 2024 por consenso

En vista de que la fijación del aumento se dio por consenso en los dos últimos años,  la noticia de que fue imposible llegar a un acuerdo en la cifra de incremento de salario mínimo no deja de sorprender, a pesar de la difícil situación económica por la que atraviesa el país.

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Sin embargo, en esta oportunidad el panorama luce desalentador. No solo hay una fuerte incertidumbre en la mesa, sino que la economía enfrenta desaceleración y se teme que el país entre en recesión el año entrante, por lo que los empresarios piden moderación en el alza y los trabajadores un incremento mayor para reactivar la economía. 

¿Habrá acuerdo entre trabajadores y empresarios?

Tras llegar al primer plazo sin una cifra clara de incremento del salario mínimo 2024 por parte de los empresarios, y sin una número sobre la productividad, la incertidumbre se traslada al campo de la negociación en los siguientes días.

La decana de la Escuela de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de La Sabana, Catherine Pereira, estima que hay poca posibilidad de alcanzar una concertación entre los trabajadores y los empresarios.

Para definir el número del aumento salarial “tradicionalmente se ha trabajado un esquema con inflación y productividad. En este caso hay una corriente de pensamiento alrededor de que un mayor incremento generará un ingreso disponible de un número muy importante de personas, de tal suerte que la actividad económica va a ser mayor pero claramente”, explica la decana Catherine Pereira.

Sin embargo, continúa la decana, “hay unos mecanismos en la economía que hacen que este tipo de aumentos, cuando son excesivos y poco fundamentados, se traduzcan muy rápidamente en aumentos de precios”.

En consecuencia, “pienso que hay dos corrientes muy distintas y en ese sentido hay poca probabilidad de concertar el salario mínimo. Seguramente el gobierno lo establecerá por decreto”. 

Para Catherine Pereira, un aumento del salario mínimo “razonable sería una inflación, aproximada del 9,6 para el año, más un 0,7% de productividad”, concluyó.

A pesar de que la posibilidad de un acuerdo parece distante, hay quienes aseguran que al Gobierno Nacional no le conviene decretar el salario mínimo.

Así lo aseguró el expresidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Diógenes Orjuela, quien aseguró que “se va a repetir la historia del año pasado”. De acuerdo con Orjuela, “el gobierno hará un acuerdo con los empresarios y luego se lo impondrá a los presidentes de las centrales, quienes están del lado del gobierno”.

“Al gobierno le sirve más hacer un acuerdo y por eso lo hará con los empresarios. Porque la peor situación para el gobierno es tener que decretar el salario mínimo,  su contradicción pública no va a ser con los sindicatos”.

El profesor de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana, Juan Nicolás Garzón, analiza que la decisión del salario mínimo 2024 está ligada al debate frente a la reforma laboral. 

“Desde el punto de vista de los empleadores, la reforma no solo va a tener un impacto sobre los costos, quizá uno de los impactos más directos, sino que puede generar mayores inflexibilidades laborales, esto, por supuesto, podría desalentar la contratación”, explicó Garzón.

De acuerdo con el académico, los empleadores llevarán este tema a las negociaciones bilaterales, pues el aumento entre 5 o 6 puntos porcentuales por encima de la inflación “no solo va a desincentivar la contratación nueva, la contratación formal, sino que también se suma a las dificultades que la reforma pueda generar para la nueva contratación”, concluyó Juan Nicolás.

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La negociación del salario mínimo 2024 se ha dado en un clima de incertidumbre 

La incertidumbre ha estado presente desde el principio, pues la mesa de negociación del salario mínimo 2024 no logró concertar el dato de productividad que se tendrá en cuenta y continuó sesionando sin establecer este número clave para la definición salarial.

Recordemos que el viernes 1° de diciembre, la directora del DANE, Piedad Urdinola, recomendó trabajar con la productividad laboral de 0,76%, durante la negociación del salario mínimo 2024.

Las declaraciones se produjeron luego de que el DANE presentó cuatro cifras de productividad, tres de las cuales fueron negativas, correspondientes al tercer trimestre de 2023:

• Productividad total de los factores: -1% 
• Productividad laboral por persona empleada: -0,7%. 
• Productividad laboral por hora trabajada: 0,76%
• Productividad media del trabajo, definida con la metodología de la OCDE: -0,31%. 

Otra causa de incertidumbre ha sido la negativa de los empresarios a proponer una cifra específica, quienes llegaron a la fecha límite para alcanzar el primer acuerdo sin una propuesta sobre la mesa.

Al respecto, el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal dijo que el aumento del salario mínimo debe estar cercano al de la inflación, para evitar impactos negativos en la economía:

“Si tenemos en cuenta que la inflación cerraría el 2023 entre 9,2% y 9,4%, como proyecta el Banco de la República, que el crecimiento del 2023 sería de 0,8% y que los últimos datos reflejan una tendencia a incrementar el desempleo en el país, si no se coloca un aumento muy en la línea de la inflación, podría haber consecuencias negativas para la economía”, afirmó Cabal.

En la otra orilla, los sindicatos han sostenido su propuesta de incremento del 18%, con la que los trabajadores tendrían poder adquisitivo para contribuir a reactivar la economía. 

De acuerdo con la propuesta presentada por las centrales obreras, además de un incremento del 18%, se deben reducir las tasas de interés y las tarifas de servicios públicos, así como regular los precios de los combustibles.

Economía en desaceleración

Los datos de productividad se suman a las delicadas cifras de la economía nacional.  De acuerdo con el informe presentado por el DANE, la variación del tercer trimestre de 2023 del PIB fue negativa de -0,3% con respecto al mismo periodo de 2022. A su vez, la información del año corrido, es decir, desde enero hasta septiembre de 2023, fue de 1%.

La inflación ha bajado, pero sigue alta 

Por su parte, uno de los factores determinantes del poder adquisitivo de la población es la inflación, que el año pasado fue la más alta de todo el siglo XXI, cuando cerró en 13,12%. 

Durante las mesas de negociación del salario mínimo 2024, el DANE presentó la variación del índice de precios al consumidor (IPC) hasta noviembre de 2023. 

Entre enero y noviembre de este año, la variación del IPC fue del 8,78%, mientras que la variación anual de los últimos 12 meses fue de 10,15%, ambos datos con respecto a los mismos periodos del año anterior.

Frente al panorama anterior, las proyecciones de inflación del promedio anual de 2023 del Banco de la República están entre 9,3% y 9,5%, mientras que las perspectivas de inflación para el próximo año están en 3%, según las estimaciones del Banco.

Por su parte, el ministro de Hacienda y Crédito Público, Ricardo Bonilla, dijo que las proyecciones del Ministerio de Hacienda coinciden con las del Banco de la República. Esta entidad anunció que la inflación podría cerrar el 2023 en 9,7%. Asimismo, aseguró que ya es momento de reducir las tasas de interés.

Ante la incertidumbre, solo resta esperar a que las negociaciones bilaterales entre las partes y el Gobierno Nacional arrojen alguna luz en los próximos días, para conocer cómo quedará el poder adquisitivo de los trabajadores, así como también las finanzas de las empresas.