La COP16 y el fondo multidonante: un paso histórico en la protección del Chocó biogeográfico
Colombia, Ecuador, Panamá y Costa Rica lanzan un fondo multidonante en la COP16 para proteger el Chocó biogeográfico y apoyar la conservación. Conozca cuál será el objetivo y la misión de esta creación.

Durante la COP16, Colombia, Ecuador, Panamá y Costa Rica anunciaron la creación de un fondo multidonante con el objetivo de proteger y restaurar el Chocó biogeográfico, una región de gran biodiversidad y un valor ecológico excepcional.
Este acuerdo permitirá financiar proyectos de conservación de ecosistemas y biodiversidad, además de mitigar y adaptar el cambio climático, lo que promoverá un desarrollo sostenible que involucre activamente a las comunidades locales y pueblos indígenas.
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Este fondo multidonante es un esfuerzo conjunto que aspira a involucrar a donantes públicos y privados de todo el mundo, y que además gestionará aproximadamente 100 millones de dólares de aquí al 2030.
Este monto se destinará a iniciativas que contribuyan a los objetivos del Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal y el Convenio sobre Diversidad Biológica (CBD), así como a metas de descarbonización y adaptación climática, con el ánimo de proteger una región vulnerable ante desafíos ambientales y sociales.

Los objetivos de esta alianza por la biodiversidad y el desarrollo sostenible en la COP16
La vicepresidenta y ministra de Igualdad y Equidad de Colombia, Francia Márquez, enfatizó la necesidad de que este fondo multidonante permita a las comunidades locales permanecer en sus territorios y cierre brechas de inequidad.
Según Márquez, la conservación debe mejorar las condiciones de vida de las poblaciones más vulnerables, atendiendo las necesidades básicas insatisfechas de estos pueblos, quienes han sido históricamente olvidados.
Por su parte, el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, habló sobre la importancia de apoyar a las comunidades que han contribuido a conservar esta región. «Esa conservación es un hecho cultural donde han prestado servicios a la humanidad sin recibir compensación, y ya es hora de reconocerlo», afirmó Murillo.
A su vez, dijo que este acuerdo entre Colombia, Costa Rica, Ecuador y Panamá es un paso significativo para visibilizar el esfuerzo de los pueblos que habitan el Chocó biogeográfico y otras regiones relacionadas.
La misión del fondo multidonante en el Chocó biogeográfico
El fondo multidonante apoyará la conservación de la biodiversidad en el Chocó biogeográfico y ecorregiones cercanas, conocidas por su rol ecológico como un puente natural entre el Pacífico ecuatoriano y Costa Rica.
No obstante, estas áreas albergan una impresionante variedad de especies, pero enfrentan amenazas como la deforestación, minería ilegal, tráfico de especies y conflictos sociales, que ponen en riesgo tanto el equilibrio ecológico como la estabilidad de las comunidades que dependen de estos ecosistemas.
El Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) también respalda esta iniciativa, y ya ha destinado recursos para la estructuración técnica del fondo. Sergio Diaz-Granados, presidente de CAF, expresó que esta iniciativa se alinea con la misión del banco por promover el desarrollo sostenible y la integración regional, y resaltó la importancia de que instituciones financieras apoyen este tipo de esfuerzos multilaterales.

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El papel de las comunidades en la gobernanza del fondo
Un aspecto innovador de este fondo multidonante es la inclusión de las comunidades locales y pueblos indígenas en su gestión. Como señaló Márquez, “La gobernanza no puede ser solo de los Estados; debe garantizar la participación activa de las comunidades”.
Así pues, la historia de resistencia y adaptación de estos pueblos, junto con su conocimiento del entorno, los convierte en actores clave para la conservación y desarrollo sostenible de la región.
Las comunidades del Chocó biogeográfico, que incluyen a afrodescendientes e indígenas, tienen un profundo conocimiento sobre el manejo de sus ecosistemas. Su rol en la conservación es fundamental, ya que estos pueblos han contribuido a preservar su territorio a lo largo de generaciones, en una convivencia respetuosa con la naturaleza.
El fondo multidonante busca potenciar este conocimiento y fortalecer su participación en los proyectos de conservación, pero también busca asegurar que sus derechos y formas de vida sean respetados.
¿Cuáles son las metas a largo plazo y compromiso internacional?
La meta del fondo multidonante es ambiciosa: recaudar hasta 100 millones de dólares para financiar proyectos que ayuden a cumplir los objetivos del Marco Mundial de Biodiversidad para 2050.
Estas metas incluyen detener la pérdida de biodiversidad, restaurar ecosistemas que se han visto más afectados, promover prácticas sostenibles y garantizar que el desarrollo en la región sea socialmente inclusivo y ambientalmente responsable.
Arnoldo Andrés Tinoco, canciller de Costa Rica, habló sobre la efectividad de los esfuerzos colectivos en este tipo de iniciativas, y afirmó “son mucho más efectivos cuando trabajamos en conjunto”. Por su parte, Juan Carlos Montero, representante especial de Cambio Climático de Panamá, reforzó el compromiso de su país con esta causa e indicó que la protección del Chocó biogeográfico y sus ecosistemas compartidos debe ser una prioridad para toda la región.
Perpetuar un patrimonio natural y cultural, un esfuerzo histórico
El Chocó biogeográfico es una de las regiones más biodiversas del mundo, pero también una de las más vulnerables. Sus ecosistemas son esenciales no solo para las comunidades locales, sino para el equilibrio ecológico global.
Las amenazas que enfrenta exigen soluciones urgentes y coordinadas, en las que el fondo multidonante juega un rol crucial al movilizar recursos y facilitar proyectos de conservación.
En última instancia, este fondo multidonante no solo busca proteger la biodiversidad, sino también promover una justicia social y étnica para las comunidades del Chocó biogeográfico.
La implementación de esta iniciativa en el marco de la COP16 representa un paso importante hacia una comisión ambiental inclusiva, en la que los pueblos originarios y las comunidades locales no solo son beneficiarios, sino también protagonistas en la conservación de su territorio y cultura.
Con el respaldo de instituciones como la CAF y el compromiso de múltiples países, el fondo multidonante para el Chocó biogeográfico se perfila como un modelo de colaboración regional que podría inspirar iniciativas similares en otras partes del mundo.
Este fondo es, en muchos sentidos, un puente entre la conservación de la naturaleza y la dignidad de los pueblos que dependen de ella y une esfuerzos para asegurar un futuro sostenible y justo para todos.