Fin de la conmoción interior en Catatumbo: seguirán restricciones por 90 días más

El Gobierno nacional dio por terminado el estado de conmoción interior decretado hace tres meses en la región del Catatumbo, el Área Metropolitana de Cúcuta (Norte de Santander) y tres municipios del sur del Cesar.

La decisión se formalizó mediante el Decreto 0467 del 23 de abril de 2025, firmado por el presidente Gustavo Petro y su gabinete, argumentando que la medida cumplió su objetivo de frenar la expansión del conflicto y recuperar el control institucional en los territorios afectados.

La conmoción interior fue decretada para enfrentar una grave perturbación del orden público provocada por enfrentamientos entre el ELN y disidencias de las FARC, que dejaron más de 80 muertos y cientos de desplazados.

Si bien la medida ya no está vigente, el Gobierno prorrogó por 90 días adicionales la validez de 11 decretos legislativos expedidos durante el estado de excepción, con el fin de garantizar la atención integral a las comunidades afectadas.

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Decretos por 90 días, bajo conmoción interior

Las normas prorrogadas están orientadas a mantener la atención estatal sobre sectores clave de la región, como el agro, la seguridad, el transporte, la vivienda y los derechos humanos. Estos decretos, según el Ejecutivo, son necesarios para enfrentar los efectos persistentes de la violencia armada, especialmente en zonas donde la normalidad aún no ha sido completamente restablecida.

Entre las disposiciones que siguen vigentes se encuentran:

• Decreto 106: medidas financieras y de alivio para productores agropecuarios desplazados o afectados.
• Decreto 107: apoyo a cadenas productivas, abastecimiento alimentario y sistemas de riego.
• Decreto 108: protección de tierras y activos rurales para campesinos y comunidades étnicas.
• Decreto 117: apoyo al sector turístico y exención transitoria de impuestos para alojamientos a desplazados.
• Decreto 118: control operacional de la Fuerza Pública en manos del comandante militar de la zona.
• Decreto 120: flexibilización de horarios y condiciones del transporte público terrestre.
• Decreto 121: autorización para proyectos de agua potable y saneamiento básico.
• Decreto 134: restricción a la circulación de insumos químicos usados en la producción de drogas.
• Decreto 137: mecanismo de protección urgente para víctimas de violaciones a derechos humanos.
• Decreto 180: fomento a economías lícitas y estrategias de sustitución de cultivos ilícitos.
• Decreto 433: fortalecimiento de las Defensorías de Familia mediante nuevas plazas territoriales.

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Asimismo, el Gobierno justificó la terminación de la conmoción interior indicando que los mecanismos de control y respuesta implementados durante el estado de excepción permitieron contener la escalada del conflicto y mejorar las condiciones institucionales en el Catatumbo. Sin embargo, el Ejecutivo advirtió que las causas estructurales de la crisis, como el desplazamiento, la inseguridad alimentaria y la presión de grupos armados ilegales, aún persisten.

Un balance oficial reveló que durante el período de conmoción interior se registraron 171 homicidios intencionales, cinco secuestros, 79 casos de extorsión, y atentados que dejaron nueve miembros de la Fuerza Pública asesinados y catorce heridos. Las acciones han sido atribuidas mayoritariamente al ELN, con modalidades que muestran una adaptación continua de estos grupos al entorno de seguridad.

Implicaciones y reacciones

Aunque la conmoción interior fue levantada, los efectos jurídicos de la medida aún se sienten. Empresarios locales afirman que seguirán cumpliendo con obligaciones fiscales extraordinarias derivadas del estado de excepción, en cumplimiento de una orden impartida por el Gobierno en febrero, a la espera de una decisión definitiva de la Corte Constitucional.

Además, organizaciones sociales han expresado preocupación por la posibilidad de que la finalización formal de la conmoción interior conduzca a una disminución de la atención estatal. El Gobierno, sin embargo, sostiene que la continuidad de los decretos permitirá mantener operativas las acciones urgentes sin necesidad de recurrir nuevamente a un régimen de excepción constitucional.

La situación continúa siendo monitoreada por las autoridades, quienes aseguran que cualquier nuevo deterioro del orden público podría requerir ajustes normativos adicionales. La conmoción interior ya no está vigente, pero sus efectos siguen marcando el presente de esta convulsa región del país.