Día Internacional de las Mujeres Indígenas: guardianas de la cultura y tradición
Las mujeres indígenas juegan un papel fundamental en la conservación de la identidad de los territorios del mundo. Hoy, 5 de septiembre, se celebra el Día Internacional de las Mujeres Indígenas y aprovechamos para hablar de una de las comunidades con mayor presencia en la capital colombiana: el pueblo Embera.
Actualmente, tres grandes comunidades pertenecientes al pueblo Embera tienen presencia en Bogotá: Dobida, Katío y Chamí. Los tres pueblos llegaron a la capital por desplazamientos forzados desde municipios de Risaralda, Antioquia y Chocó.
Estos pueblos indígenas, ricos en tradiciones culturales, tienen sus propias lenguas, llevan vestimentas tradicionales de su cultura y pinturas corporales que mantienen vivas sus raíces en medio de los desafíos que supone el abandono de su propio territorio.
Informes del Dane revelan que el 71,6% de la población indígena registrada en el país está sumida en el analfabetismo, factor que agrava la ya aguda situación de las comunidades que luchan por construir un hogar nuevo en tierras lejanas a su origen.
El Estado ha puesto en marcha varios proyectos que incluyen la reubicación de las comunidades indígenas, la formación y capacitación de estos pueblos y la preservación de sus tradiciones culturales. Sin embargo, el panorama es desafiante y a la fecha los pueblos indígenas continúan en posición de lucha y reclaman un espacio en las principales ciudades del país.
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Cultura y tradición: El rol de las mujeres indígenas
Según la Organización Nacional Indígena de Colombia hay al menos 102 comunidades indígenas en el país. En Bogotá convergen varios de estos pueblos y se cree incluso que más de 37.000 indígenas habitan actualmente en la capital colombiana. Los Embera son precisamente una de las comunidades de mayor presencia en el país.
Este pueblo no solo se extiende por el territorio colombiano, también habitan ciertos sectores en Panamá y Ecuador. Se estima que esta comunidad está conformada por alrededor de 350.000 personas.
Las mujeres en la comunidad Embera son esenciales para proteger su cultura, teniendo un papel clave en mantener las costumbres y tradiciones de su grupo. Estas mujeres preservan y heredan las tradiciones culturales de su comunidad, garantizando la permanencia de su identidad en tiempos difíciles.
Las celebraciones indígenas son uno de los puntos más importantes en la cultura de los Embera. Durante estos eventos, las mujeres son responsables de cocinar platillos tradicionales, hacer vestimentas y crear adornos que tienen un significado simbólico para la comunidad y su historia.
Además, las mujeres indígenas de la comunidad tienen una importante labor en la transmisión de tradiciones ancestrales, como las canciones y bailes que forman parte de sus festividades y que reflejan su visión del mundo.
Otra tradición cultural que las mujeres indígenas siguen preservando es el empleo de pinturas corporales elaboradas con la semilla de jagua. Durante festividades y rituales, las mujeres dominan la técnica de aplicar pinturas que tienen significados específicos según los trazos y patrones, enseñando a las jóvenes su importancia simbólica. En cada comunidad Emberá hay diferencias en los patrones, lo que fortalece su identidad tanto internamente como en comparación con otras comunidades indígenas.
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Iniciativas para el cambio
El programa ‘Transformaciones Culturales para la Paz’, una iniciativa de la Secretaría de Cultura que busca, entre otras cosas, dignificar a las mujeres indígenas ha erguido escuelas enfocadas en la comunidad Embera que ofrecen, entre otras cosas, talleres de formación para las mujeres.
El proyecto se ha propuesto tres grandes pilares. En primera medida, la iniciativa busca construir tejido social y trabajar a partir de la sororidad. La diversidad del pueblo Embera resulta en diferencias entre cada una de las familias, que tienen su propia lengua y tradiciones. El objetivo en estos grupos de mujeres indígenas es desarrollar el sentido de sororidad y fortalecer la comunidad.
Además, la iniciativa busca establecer una red de apoyo con el estado y entre la propia comunidad Embera. La Secretaría desarrolló una escuela para mujeres indígenas en la que se celebra la riqueza y tradición cultura del pueblo indígena.
Como última instancia la Secretaría se propone mitigar una de las problemáticas más latentes que enfrenta la comunidad indígena en grandes ciudades del país. Muchos de los pueblos indígenas que convergen en la capital llevan décadas viviendo en la ciudad. Sin embargo, enfrentan dificultades para integrarse a la comunidad capitalina, por lo que se proponen iniciativas de integración y formación, con el fin de forjar aterrizar las dinámicas de la ciudad a la realidad de las comunidades indígenas.
